Buenos días:
La vida nos pone pruebas para poder saber qué grado de ceguera tenemos los seres humanos. Y la frase de partida de hoy es un claro ejemplo de la cantidad de personas que, en algún momento de nuestra vida, no hemos querido ver más allá de lo que nuestros ojos nos muestran. Por eso, te he comentado alguna vez que es necesario no sólo VER con los OJOS sino con el CORAZÓN; tampoco con la mente; porque ésta nos juega muchas malas pasadas.
La PALABRA es lo que más confunde al ser humano porque puede venir disfrazada de cualquier forma, olor o sensación. Pero hay algo que te puede ayudar a ver más allá de lo que tus ojos te muestran. La fórmula mágica se llama COHERENCIA. Una palabra que no venga acompañada de coherencia, significa que es una palabra vacía de contenido. No deja de ser bonita, como un poema, una historia, etc; pero aquella palabra que no se acompaña de ACCIÓN que te demuestre que lo que escuches tiene que ver con quien lo DICE es la mayor prueba de la SINCERIDAD que las mismas palabras pretenden hacerte ver. En alguna ocasión, más de uno de nosotros hemos vivido una situación de este tipo y ese sonido embaucador nos ha hecho CEGARNOS porque los enamorados de la VIDA nos gustan los pensamientos bonitos que nos animan a ser mejores personas. Pero, en este mundo, existen personas sencillas que pueden aportar más con simples palabras, a veces, más duras o con las cuales nos podemos sentir molestos pero, observa. Prefiero escuchar algo que en un momento dado no me guste, a un encantador de sirenas.
Recordad la historia del flautista de Hamelin. Entiendo que muchas veces estamos tan inmersos en nuestros problemas, ciegos de amor o qué se yo; que no somos capaces de ver más allá de nuestros ojos. Pero es necesario despertar y dar fuerza a esa visión interna que todos tenemos para poder evitar que muchas situaciones desagradables que irremediablemente hemos de experimentar no nos hagan tanto daño como el que produce un desengaño o, lo que yo denomino, autoengaño. A veces somos nosotros mismos los que permitimos que ese engaño que vivimos nos afecte más de la cuenta porque hemos preferido mirar hacia otro lado, siendo conscientes de que la realidad nos estaba mostrando otra cosa.
Pero, si lo has experimentado o aún no te ha ocurrido, tampoco te flageles por su vivencia. Todo forma parte de un todo. Con esto que te digo en voz alta no te quiero decir que lo vas a poder evitar, sino que trates de salir cuanto antes de dicha situación y le des protagonismo a esa capacidad visual INTERIOR que tienes, que estoy seguro de ello, para que te muestre la REALIDAD que, a veces, no quieres ver. eso te ayudará a entender que tienes más poder del que crees poseer.
Feliz Lunes, y te animo a qué despiertes tu CAPACIDAD observadora. Es el mejor instrumento que posee el ser humano y que menos utilizamos.
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