sábado, 19 de marzo de 2022

Cap 16 El Aprendizaje: la mal llamada formación académica de nuestro interior.

     Muy buenas volador@ nueva semana dispuesto a asumir el reto de disfrutar de un nuevo vuelo. Tras descubrir que nunca estamos solos podemos seguir avanzando en nuestro camino tan particular y angosto.  Lo importante es, a pesar de las dificultades, disfrutar al máximo esta experiencia o aventura denominada vida y poder acercarnos un poco más al origen para poder encontrar así sentido a muchas de nuestras inquietudes. Hoy daremos un paso más hacia nuestro interior para descubrir la receta de nuestro bienestar. Como siempre, agradezco tus comentarios sobre el vuelo de hoy y un like al video si te gustó. Déjate llevar y siente en tu interior las sensaciones que producen un nuevo Vuelo del Ser.

    Volador@ hoy ha llegado el momento de acometer otra cuestión importante de tratar de comprender o, por lo menos, acercarnos a apreciar el verdadero sentido de su existencia en nuestras vidas. El aprendizaje: la formación académica de nuestro interior. El aprendizaje es algo que nos acompaña durante toda nuestra vida y en lo que nos tratamos de apoyar, igualmente, para justificar muchas de las experiencias que vivimos. En cuantas ocasiones te has repetido hasta la saciedad esto me ha ocurrido para aprender: un desengaño, un fracaso personal o laboral, etc. Y es que estamos empeñados en acaparar tanto a nivel material como personal. Por eso hoy vamos a desarrollar en nuestro vuelo de hoy esa necesidad del ser de querer acaparar aprendizajes a lo largo de toda su vida para tratar de alcanzar un supuesto bienestar, porque todo lo que hacemos gira en torno a ello. Una cosa es conocer o recibir información para hacernos cuestionarnos cosas, que es lo que pretendo yo hacer cada semana con estos vuelos y otra es tratar de estar viviendo la sensación de la necesidad de un aprendizaje continuo que, a la vez, provoca que no disfrutemos de muchas de las experiencias que vivimos día a día.

    El ser humano necesita continuamente generarse necesidades para poder estar bien. Y ya lo he repetido en varias ocasiones, crearse necesidades, tener deseos o expectativas está bien pero otra es obsesionarse con ellas y focalizar toda tu vida en ello. Porque, de todo lo que te planteas ¿qué cantidad de cosas ocurren tal y como esperabas?. Seguramente que muy pocas, salvo que seas una de esas personas que denonimanos como afortunado o con suerte. Yo hace tiempo que dejé de pensar en esa necesidad de justificar todo lo que me ocurre en un necesario aprendizaje, porque esa  necesidad perentoria por aprender hizo que, en muchas ocasiones, me olvidase de disfrutar en todos sus sentidos de muchas experiencias vividas. En realidad, no tenemos nada que aprender ya que todos y cada uno de nosotros como te indiqué en el capítulo 14, somos seres extraordinarios y sumamente poderosos; con el handicap de que aquí venimos con muchas de nuestras capacidades limitadas para poder adaptarnos a vivir las aventuras previstas en nuestra vida. Ello conllevaría que no es necesario aprender nada, sino disfrutar de todo lo que a diario nos ofrece la vida. Ojo, siempre lo recuerdo, no podemos tomarnos nada de esto en un sentido literal y estricto, lo tenemos que entender teniendo en cuenta, haber iniciado previamente el proceso de desaprender que indicábamos al principio de nuestro vuelos.

    Y me voy a explicar un poco mejor con un ejemplo. Cuando digo que no tenemos nada que aprender, no me refiero a que no tenemos que leer y estudiar, por ejemplo, cuando cursamos una carrera o cuando desarrollamos un trabajo laboral, ya sea profesional o empresarial. Porque todo ello forma parte intrínseca de la experiencia a vivir durante esos acontecimientos. Me refiero a que mentalmente no debemos de tratar de obsesionarnos con esa necesidad perentoria de querer estar en un aprendizaje continuo para sentirnos mejor. Hay mucha gente que consume cantidad de libros, videos, o cursos de formación con la finalidad de sentirse realizados a través de un aprendizaje que no es del todo real y cierto. Porque si realmente fuese así, cualquier persona por el mero hecho de consumir todo este tipo de productos estaría formada al mismo nivel y, sin embargo no es así. Lo que pretendo transmitirte en este vuelo en cuanto al llamado "aprendizaje" es que realmente te debes fijar en todo aquello que lees, visualizas o estudias para tratar de ser mejor no en la necesidad de acaparar sino en la capacidad de captar las señales que te harán entender en tu ser esa sensación de cambio o transformación interior.


    Voy a tratar de ser un poco más explícito para que trates de entender bien lo que realmente quiero hacerte llegar. Yo siempre te he dicho que a través de estos vuelos no te voy a enseñar nada que tu no sepas, porque para mi todos somos iguales y no hay nadie más listo o menos listo que otro. Eso sí, a lo largo de nuestra vida, en función, de nuestras vivencias vamos mostrando una parte diferente de cada uno. No porque, en función de tus vivencias, hayas aprendido más o menos, sino porque es el momento de mostrar y, sobre todo, conocer esa parte de ti que, a veces has pensado que no tenías.

    Una de las mayores cualidades del ser que admiro como espectador de la vida de cualquier volador es la capacidad de que cada uno tiene de mostrar su verdadero interior, según en qué momento de nuestra vida. Me consta que hay muchos volador@s, esperando que llegue ese momento de despertar porque realmente lo desean y no paran de realizar cursos espirituales, de coaching, etc para poder conseguir sentirse realizados. De verdad te digo que tu despertar interior no lo vas a conseguir jamás ahí. Ese tipo de actividades te van a servir para despertar en tu mente la señal que te indicará que ahora es el momento de mostrar quien realmente eres. Por eso cuando has consumido algún tipo de ese contenido y, en alguno, te has sentido engañado o estafado; no lo veas así ya que forma parte del conjunto de señales que te irán haciendo recordar el momento de tu verdadero despertar. De hecho, yo estoy aquí para aportarte alguna de esas señales. Seguramente alguno de vosotros, no sé si hoy, mañana o dentro de un año; da igual el momento esto que hoy escuchas y que te puede sonar hasta extravagante venga a tu mente como ese punto de partida de tu despertar.

    Todos formamos piezas indispensables en nuestra vida para aportarnos información y experiencias. es como si fuésemos construyendo un gran puzle en nuestra vida. Cada una de las piezas es necesaria (en el sentido de cada uno de nosotros) para que podamos reproducir esa imagen final que todos vemos al finalizar un puzle de infinitas piezas. El día que lo terminamos, inevitablemente finaliza todo y cruzamos el umbral de nuestra marcha a través de la experiencia aquí denominada muerte. Yo soy una pieza de tu puzle y tú eres una pieza del mío. El panadero que ves cada mañana, la pareja que te ha traicionado, el amigo fiel que siempre está contigo, etc. Los encuentro casuales entre nosotros, no lo son tan casuales, sino que aparecen de forma casual para que vivas esa esa experiencia así; pero, en realidad, ocurren porque son piezas necesarias.

    Te voy a proponer un reto y esto es algo como cuando estudiamos, hacer un caso práctico. No hay prisa ni tiempo pero debes proponértelo para que puedas ir entendiendo todo esto que trato de explicarte que no es nada fácil de entender, a priori. Conviértete en un observador de tu propia vida. Piensa en cosas que deseas hacer y que, a veces, no salen. O que pensabas que no iban a ocurrir y que de pronto todo cambia y ocurren. Si te vas fijando en ello comenzarás a percibir las señales que te va mostrando la vida para que te des cuenta de que todo está entrelazado y organizado y que nada se deja al azar. Me encantaría que si detectas ese tipo de señales, tras tu observación, las compartas con el resto de voladores a través de un comentario para que, entre todos, vayamos percibiendo la realidad de esas señales. Al principio, costará más pero poco a poco os iréis dando cuenta de que están ahí y no las veíais porque estamos tan inmersos en el día a día que todo nos distrae.

    Bueno volador@ hoy me he colado un poquito pero es que al principio no cogía el sentido de lo que esta semana te quería transmitir realmente. Y cuando me he conectado, ya no hay quien me parara. Ya sabes que esto no es un canal más de un youtuber que busca destacar sino que sólo es una vía de comunicación y envío de señales. De ahí, la indiosincracia propia de estos videos. que para mi son como un directo. Algún día haremos alguno para poder interactuar un poco más. Como siempre agradezco tu fidelidad por estar ahí una semana más, te doy la bienvenida si es tu primer encuentro y, como siempre, deseo y espero que hayas disfutado de este nuevo vuelo. Nos encontramos la próxima semana. Un inmenso abrazo.

    En Motril a 19 de Marzo de 2022 

    Javier Mercado 

  Sino quieres leer, puedes escucharnos a través de nuestro podcast:

 O bien a través de nuestro Canal de Youtube:

domingo, 13 de marzo de 2022

Cap 15 Los Acompañantes del Ser

     ¿Qué hay volador@? ¿Preparad@ para emprender un nuevo vuelo?. Aquí estamos una nueva semana dispuestos a seguir descubriéndonos y a tratar de comprendernos un poco más para encontrar ese equilibrio tan necesario con nuestro ser. La pasada semana nos adentrábamos a conocer un aspecto importante como son nuestras limitaciones, ya que somos seres sumamente extraordinarios y poderosos; sin embargo, este viaje nos vemos a hacerlo con nuestras cualidades más básicas; lo que nos hace más vulnerables. Una semana más, agradezco tus comentarios sobre el vuelo de hoy y te doy las gracias por compartir este vuelo con futuros aventureros. No nos queda otra que apretarnos el cinturón y tomar pista. Aquí comienza El Vuelo del Ser.

    Volador@ hoy quiero compartir contigo, algo que me ha costado mucho comprender hasta ahora. Y no es otra cosa que la mal llamada "soledad del ser". ¿Cuántos malos momentos has pasado y sufrido en soledad? Un fracaso en la época estudiantil, una decepción amorosa, una traición de un amigo, etc. Cuesta mucho vivir esos momentos en soledad y tratar de recomponernos para volver a empezar de nuevo. Sin embargo, a pesar de creer que esos momentos los hemos vivido o los vivimos o viviremos en soledad, no es del todo cierto. He de decirte que jamás pasamos un minuto en plena soledad total y absoluta. Cada uno de nosotros vivimos este viaje acompañados desde nuestra entrada hasta nuestra salida. Hay quien los llama ángeles, espíritus, o guardianes del libro de la vida. Pero cada uno de nosotros, cuando iniciamos este viaje, estamos acompañados en  todo momento por uno o dos seres que tratan de velar y observar el proceso de nuestra vida para que todos y cada unos de los acontecimientos que nos corresponden experimentar lleguen en su debido momento.
    Hay muchas personas que jamás llegan a conectar en esta experiencia con ellos o se percatan de su existencia pero siempre están ahí, aunque no notemos su presencia. Hay quién piensa que es un familiar o un antepasado pero, en realidad, su existencia y vinculación con nosotros no tiene nada que ver con nuestra vida  aquí. Ese vínculo nace y se contrae mucho antes de llegar aquí. De hecho, ellos son quizás, lo que peor pasan nuestro seguimiento, al ser conscientes de todo y no poder advertirnos de nada de lo que nos ocurre aquí y ahora. Pero, si tratas de acercarte a tu verdadera esencia podrás llegar a experimentar su presencia de forma psíquica y mental, ya que de forma física es casi imperceptible. Esto puede parecer un poco descabellado pero creo importante que dediquemos un pequeño vuelo a conocer su existencia, porque ello implica que jamás vas a sentirte sol@ en este viaje. Aunque busques momentos de soledad con respecto al resto de mortales, siempre estarás acompañado. Por tanto, es muy importante que dejemos  de sentirnos desolados o abandonados en los momentos más duros de nuestra vida. En esos momentos, es cuando más podemos notar su presencia. Nos ayudan a través de una música, un recuerdo o aquello que tanto nos gusta.  Tienen el poder de conectar con nuestra mente de forma inconsciente y sin que nos demos cuenta arroparnos con su presencia.
    Su presencia es continua a nuestro alrededor pero no puede intervenir para cambiar nada de lo que hemos de experimentar ya que, precisamente, su misión es velar porque podamos disfrutar de todos y cada uno de los momentos previstos a sentir por nosotros mismos. No sé si tu habrás tenido oportunidad  de contactar con alguno de ellos. Te aseguro que se puede llegar a hacer en un estado de concentración pleno y de relajación de nuestra mente. Es más, puedes llegar a mantener una mínima conversación mental con ellos. Y digo mental, porque como dije en el anterior vuelo, es una cualidad que poseemos de dónde venimos pero aquí no la podemos usar para nuestro día a día. Sin embargo, en este tipo de comunicaciones sí podemos llegar a experimentarla. Es casi como una conversación con uno mismo, al principio, tienes tus dudas de si es tu propia imaginación la que realmente te habla o tu subconsciente pero te puedo asegurar que no es producto de tu imaginación y que puedes llegar a conectar con ellos. Por ello, te invito a que pruebes en momentos de soledad con plena relajación mental y sin sentirte presionado a  querer contactar con alguien o algo. Deja que sea tu propia mente la que te guíe y te haga llegar a ese momento de conexión. Al principio, descartarás las primeras sensaciones de comunicación pero, con el tiempo, te darás cuenta de que están ahí para ciertos momentos de tu vida aportarte seguridad y ánimos.

    Por ello, creía importante que un vuelo, por lo menos, lo dedicáramos a ellos. A esos acompañantes misteriosos y solitarios que está siempre con nosotros. Así, a partir de ahora, cuando te sientas sól@ debes de pensar si realmente lo estás. Cuando pases un mal momento, refúgiate en ellos. Hay quién los denomina dios, santos, etc; sobre todo, algunas  religiones. Pero en realidad, no están ahí para que les pidamos, sino simple y llanamente para acompañarnos en todo nuestro viaje. Yo he pasado también esa época en que pedía creyendo que se me concedería algo; sin embargo, con el tiempo descubres que puedes experimentar la sensación de pedir y la causalidad de recibir, porque las casualidades realmente no existen. A día de hoy no creo que la vida nos de algo por pedirlo o por salir a buscarlo, sino simplemente llega porque forma parte de tu vida. Ya lo hemos dicho en muchas ocasiones, cuando vemos a alguien afortunado y lo hemos mal llamado suerte. El don de pedir no va siempre acompañado de la virtud de otorgar.
    Yo, de hecho, creo y confío tanto en ellos que, por ejemplo, noto su presencia cuando me empujan a sentarme a escribir el guión semanal que comparto con vosotros durante cada vuelo, sin saber ni siquiera minutos antes de sentarme de qué voy a hablaros cada semana. Sin embargo, una vez me siento en mi ordenardor, simplemente me dejo llevar por lo que me viene a la mente. Hay quien puede pensar qué imaginación tiene este chico o qué punto de locura tiene. Ya os dije, que en otras circunstancias, quizás nunca hubiese iniciado este camino por mi forma de ser tan sencilla y discreta. Sin embargo, una vez que descubrí quien soy, y no lo digo en tono egocéntrico ni peyorativo, sino en el pleno sentido de descubrirme en sí y reconocerme tal y como soy, hace que tenga sentido poder expresarme con total libertad lo que pienso y siento.  Esto que estoy haciendo hace, quizás unos meses, hubiese sido impensable e inimaginable llevarlo a cabo. Pero cuando te descubres es cuando realmente muestras al mundo quien eres con total libertad y eso creo que le ocurre a muy pocas personas en este viaje. Tengo la sensación de que son muchos los que abandonan esta experiencia tal y cómo la empezaron, sin llegar a ser ellos mismos o permitirse expresarse con total libertad y sin miedo a críticas. Ese miedo que nos acompaña a diario, cuánto daño nos hace realmente a lo largo de nuestra vida y de cuántas cosas nos priva igualmente.
    Bueno volador@ voy a ir concluyendo este vuelo resumiendo la idea principal de este encuentro. y no es otra cosa que llamarte la atención de que, a partir de este vuelo, desaparezca de tu mente la idea de la soledad de tu ser. Que cuándo peor estés o más sólo te encuentres, te acuerdes de este vuelo y tengas la certeza de que ninguno de los momentos que aquí experimentamos, lo hacemos en soledad. Otra cuestión es que no seamos capaces de notar su presencia pero nuestro guardianes o acompañantes están ahi. Da igual el nombre que les pongamos, lo importante es ser conscientes de su existencia. Por eso, igualmente, cuando nos marchamos, nunca lo hacemos en soledad, En ese caso, (el momento de nuestra muerte), no sólo están ellos sino otros seres más que nos ayudan a entender ese cambio que sufre nuestra verdadera esencia al abandonar este mundo y nuestro cuerpo físico. Pero esta cuestión  , ya la abordaremos con más profundidad en otro vuelo que destinemos a avanzar sobre nuestra muerte, tema que ya tratamos de forma introductoria en nuestro capítulo doce. 
    Nos disponemos a bajar en altura para que nuestra vuelta a la rutina social y mental sea lo menos brusca posible. A veces, cuando cogemos altos vuelos es complicado volver a la realidad terrenal del ser. Hasta el próximo vuelo. Mientras tanto, te deseo lo mejor en tu día a día y deseoso de volver a encontrarme contigo la próxima semana con otra nueva aventura que experimentar. Espero que hayas disfrutado y gracias nuevamente por estar ahí.
    Recibe un inmenso abrazo.
    En Motril a 12 de Marzo de 2022
    Javier Mercado

Sino quieres leer, puedes escucharnos a través de nuestro podcast:
O bien a través de nuestro Canal de Youtube:

domingo, 6 de marzo de 2022

Cap 14 El Ser y sus limitaciones

     ¿Qué tal volador@? Una nueva semana dispuestos a subir a las alturas para liberar nuestro ser de las grandes ataduras terrenales que nos hacen olvidarnos de nosotros mismos. Prepárate a avanzar un poco más en esta aventura que hemos iniciado. La pasada semana fue un tema duro de procesar porque es algo muy complicado de aceptar y cambiar, esa falsedad del ser está tan arraigada que difícilmente se puede romper con ella. Pero no desistas, todo en la vida llega si ponemos ganas y empeño. Gracias por tus comentarios y likes. Te doy la bienvenida una semana más a un nuevo episodio de El Vuelo del Ser. 


    Volador@ esta semana quiero avanzar algo más acerca de un tema que casi todos nos hemos cuestionado alguna vez en la vida, sin embargo pocas son las certezas que tenemos. Yo ye voy a transmitir lo que yo pienso según lo que he podido averiguar a través de mis experiencias radiofónicas, basadas en multitud de entrevistas a muchas personas. Pero, sobre todo, y lo más importante basado fundamentalmente en lo que yo siento y reconozco. Porque, si me he dado cuenta, que el ser humano basa sus opiniones y sapiencia en base a lo que lee, ve y escucha; sin embargo se olvida de un elemento muy importante y, a veces, mucho más certero que todo lo demás y me refiero a lo que uno siente y reconoce por sí mismo.

    El ser que nos ocupa o habita, de por sí es un ser muy especial y único. Y me refiero al ser que nos ocupa o habita en el sentido de que nuestra verdadera esencia es mucho más poderosa de lo que realmente siente y piensa en esta experiencia terrenal. Creo que ya os lo he confesado en anteriores capítulos de que que yo tengo el convencimiento real y absoluto de que la vida de nuestro ser no comienza al nacer aquí o termina con la muerte. Sino que ya existimos antes de venir aquí, simplemente que cuando nacemos en este planeta, tenemos que hacerlo con una serie de limitaciones para no ser diferente a los demás. Porque en el momento que aceptamos vivir esta experiencia, aparte de aceptar todos y cada uno de los momentos y experiencias que aquí vivimos; tenemos que aceptar la forma de vida que hay en este planeta. Ello supone renunciar a ciertas cualidades o capacidades que nuestro ser posee y que se ven mermadas cuando nacemos; como por ejemplo, la capacidad que todos tenemos de comunicarnos telepáticamente sin necesidad de hablar; en esta experiencia está totalmente anulada. Es como cuando accedes a un club social en el que existen unas normas de obligado cumplimiento. También quiero que sepas que uno de los motivos por los que venimos a experimentar esta vida es para vivir las sensaciones que provoca en nosotros una mentira, falsedad o traición. En condiciones normales, fuera de este planeta, esas sensaciones no se podrían experimentar jamás.

    También quiero que sepas, que nuestra vida aquí es sólo y exclusivamente una experiencia o aventura. La tierra es un mundo experimental para sentir ciertas sensaciones que no podríamos experimentar jamás en otros mundos. Además, otro de los motivos por los que los seres como nosotros nos lanzamos a vivir esta aventura es para vivir lo que más nos gusta: el sufrimiento y el dolor, ya no físico, sino mental. Fíjate que puede parecer una utopía todo lo que te cuento pero es la pura realidad. Por ello, trato de hacer estos vuelos para tratar de abrirte la mente y que te reconozcas tal y cómo eres. Esto que te cuento difícilmente lo vas a poder encontrar en un libro de texto o por muchas horas de estudio que dediques. Únicamente podrás entenderlo si realmente llegas a vivir la conexión real con tu ser, o tranquilo que finalmente cuando te marches de aquí, en el momento de nuestra muerte, todo esto tendrá esa explicación. Es como cuando despiertas de un mal sueño y ves la realidad de otra forma. Eso nos ocurrirá llegado el momento del abandono de este lugar a través del proceso de la muerte. Por eso, ya te avancé en un capítulo que no hay que temer a la muerte jamás, sino recibirla como el fin de esta experiencia. Eso sí, hay que tener claro que mientras dure hay que disfrutarla. Porque si aquí venimos a experimentar hay que aprovechar cada segundo que nos otorga la vida.



    Habrás notado, o quizás hayas tenido oportunidad de conocer a personas que, a veces, tienen pequeños lapsus en la limitación de nuestras cualidades. Como por ejemplo personas con la capacidad de sentir lo que otro siente, o incluso escuchar lo que otro habla o siente. No es algo común, pero te puedo asegurar que hay personas con dicha capacidad. Yo he conocido alguna, pero las que más he conocido son los mal llamados "adivinos o videntes". En realidad, a mi me gusta referirme a ellos como lectores del destino o libro de la vida. Este tipo de personas me han ayudado a comprender aún más que no decidimos aquí nada y que todo nuestro camino está ya marcado antes de venir. Es como si nuestra vida estuviese toda guionizada y ellos tuviesen la capacidad de acceder a algún capítulo de nuestro guión. Sin embargo, los verdaderos lectores del libro de la vida no tienen la autorización para podernos dar detalle de todo aquello a cuanto conectan, sino sólo a pequeños flashes que, a veces, nos pueden ayudar a darnos un poco de paz o tranquilidad. Te puedo asegurar que esas personas existen, porque yo he vivido experiencias en primera persona que me han corroborado con puntos y comas, experiencias que a posteriori he vivido una a una.  

    Ahora bien, si te puedo decir que esas personas jamás las vas a encontrar en un gabinete de videntes adivinos, porque esa cualidad la desarrollan siempre personas anónimas que normalmente no pueden usar esta cualidad como medio de vida. Pero, haberlos, te aseguro que los hay. Puede que incluso tú mismo te hayas cruzado con alguno de ellos sin darte cuenta. Son personas que aparecen te transmiten ese mensaje que te da paz o tranquilidad  y puede que desaparezcan. Es más, si los llegas a reconocer nunca deberías preguntar porque sería ponerles en un aprieto. Normalmente te contestarán que no lo ven o no lo saben, pero, en el fondo, conectan con tu libro y lo ven, lo que ocurre es que no pueden contarte todo lo que desearías porque sino imagínate que es como cuando ves una película que ya te han contado el guión, seguro que ya no la ves igual. Imagínate que vienes a vivir una vida y que sabes cada minuto lo que va a ocurrir, no tendría razón de ser. Por eso, cuando venimos aquí, a pesar de que toda nuestra vida ya está previamente guionizada, venimos con el disco duro borrado para ir desgranando experiencia a experiencia. 

    Párate a pensar cuántas experiencias de las que has vivido has notado la sensación de que ya las habías experimentado. Cuántas personas que aparecen y desaparecen a lo largo de tu vida, cuando las ves es como si las conociéses de toda la vida; aunque luego al paso del tiempo acabes enfadado con alguna de ellas. Una pareja, por ejemplo, cuando alguien lo ves por primera vez y sientes algo especial ya por el mero hecho de verla. Así, te podría poner multitud de ejemplos y detalles que vivimos cada día pero que pasan inadvertidos por nuestro lado, porque nos metemos tanto en experimentar esta experiencia que apenas pensamos en ella. Sigo insistiendo y lo haré hasta la saciedad que no pretendo que creas a pies juntillas lo que te cuento, sino que pienses en ello. ¿Qué te resuena y que no? Estoy seguro de que muchas sensaciones de las que te hablo seguro que habrás vivido pero jamás te has parado a pensar en ellas. Quizás este sea el momento para que lo hagas o simplemente sea el momento en que abandones este vuelo. De tí depende, de hasta donde quieras llegara cuestionarte sobre tí y tu ser. Te aseguro que cuando comienzas tiene el inconveniente de que siempre quieres un poquito más y otro más; pero esa es la verdadera esencia de nuestro ser el avanzar hacia nuestra búsqueda. 

    Hoy quizás sea un capítulo duro para los más escépticos, lo reconozco. Para poder procesar todo esto no lo podemos hacer dentro de nuestra vorágine diaria. es necesario ese momento de recogimiento. Ya te digo que a mi es algo que me costó bastante, no te lo voy a negar. Muchas veces ocurre tras una crisis interna psíquica, laboral o personal. Cada uno tiene su momento de despertar, no hay que provocar algo sino es el momento. Es más, si vas dándote cuenta de todo lo que aquí compartimos, puede ser que haya personas que se vayan de aquí sin ni tan siquiera acercarse a conocerse un poco, totalmente respetable porque cada uno elige lo que quiere experimentar y vivir. Es más, lo que yo estoy aquí compartiendo tampoco lo hago porque sea mejor o peor que nadie, simplemente porque soy el nexo de conexión para tí que estás leyendo nuestro blog, escuchando nuestro podcast o disfrutando de este canal de Youtube. Cada uno encuentra la señal para conectar con ese despertar del ser en el lugar oportuno y en el momento oportuno. No por mucho madrugar, amanece más temprano. Por ello, no por mucho meditar, estudiar, hacer cursillos, etc encontraremos realmente lo que buscamos sino sólo y exclusivamente cuándo esté previsto y, teniendo en cuenta que esté previsto. 

    Por ello, y esto es un ejemplo, no por mucho buscar un hijo dentro de las diferentes posibilidades de que venga, de forma natural, in vitro, etc va a llegar. Si forma parte de tu vida aparecerá y sino simplemente tenías que vivir esa sensación y experiencia de querer o no experimentar realmente. Aunque esto es un poco más complicado de lo que parece y seguramente tendremos que recuperarlo en otra ocasión. Voy a tener que ir finalizando nuestro vuelo porque el tiempo apremia y no quiero aturullarte con demasiada información incómoda para nuestra mente, ya que no estamos acostumbrados a hablar de esto de forma coloquial y cercana. Yo trato de transmitirte todo esto de la forma más sencilla y con las palabras más asequibles para poder entender algo que posiblemente sea, a priori, inentendible en condiciones normales pero, no por ello, voy a dejar de expresarlo y compartirlo si así lo siento. Te dije que iba a ser sincero conmigo mismo y mucho más contigo, con independencia de las posibles burlas o críticas de aquéllos que piensen de otra manera, cosa que respeto totalmente.  

    En fin volador@, gracias una semana más por estar ahí y, sobre todo, ésta que ha sido un poco más complicada pero sólo te pido que pienses en todo lo que aquí hemos compartido hoy y trates de pensar en aquello con lo que conectas y sientes. Si te ha ayudado a algo, me alegro y sino la próxima semana tendremos una nueva oportunidad de experimentar altos vuelos. Cuento contigo. Un inmenso abrazo.
  
     En Motril a 5 de Marzo de 2022
    Javier Mercado

Sino quieres leer, puedes escucharnos a través de nuestro podcast:

O bien a través de nuestro Canal de Youtube: 

sábado, 26 de febrero de 2022

Cap 13 Falsedad: La gran mentira del ser.

     Bienvenid@ volador@ una semana más a un nuevo Vuelo del Ser. Volveremos a profundizar en otra ocasión La Muerte, porque hay mucha tela que cortar para entender cuál es su función y por qué hemos de perderle ese miedo o angustia que muchas personas le tienen. Esta semana cambiamos de tercio y vamos a volver a entrar un poco más en nuestro interior. Como siempre, agradezco tus comentarios por cualquier vía y estar ahí cada semana, cosa difícil ya que siempre tenemos cosas que hacer. No me demoro más porque nos vamos a tomar pista para despegar hacia un nuevo vuelo.


    Volador@ llega el momento de tropezarnos con otra piedra de nuestro camino muy habitual. La falsedad del ser. Esta cualidad viene motivada por muchos aspectos de nuestra personalidad, pero has de reconocer que es un aspecto muy arraigado en cada uno de nosotros y que ,por mucho que puedas decir que no lo practicas, forma parte de tu día a día. El que forme parte de tu día a día hace que realmente no te muestres tal y como eres, con lo cuál ello nos lleva a sentirnos, en muchas ocasiones, mal y a nos provoca mucho más daño del que realmente creemos. 

    No me puedes negar que no forma parte de tu vida. ¿En qué casa, familia o círculo de amigos no ocurre que se va uno y el resto salen a despellejarlo vivo y mientras ha estado delante todos felices y contentos?. ¿Por qué actuamos así?  Puedo entender que a veces, uno puede tirar de un poco de falsedad por no ser cruel pero te puedo asegurar que, a la larga, quien sale más perjudicado de ello, no es a quien engañas sino uno mismo. Porque cada vez que mientes o no dices o haces lo que sientes se provoca una pequeña lesión a tu propio ser. Si ello, lo multiplicas por la cantidad de veces que se puede repetir a lo largo de tu vida, te puedo asegurar que la herida que nos provocamos, a veces, es desgarradora y no somos conscientes del daño que nos llegamos a producir. Piensa que mientras engañas a alguien o te muestras falso ante él, quién realmente más sufre eres tú porque eres consciente de ello. La otra persona también puede llegar a sentirse mal, si llega a enterarse o ser consciente pero es de forma puntual y circunstancial. Sin embargo, el daño que tú puedes llegar a experimentar, sin darte cuenta es brutal.

    Por eso, hoy quiero invitarte a que pienses en ello y valores si realmente es bueno que forme parte de tu vida o, por el contrario, es el momento de empezar a desterrar esta idea tan arraigada de tu mente. No va a ser tarea fácil pero te puedo asegurar que, como tantas otras cosas, cuando lo empieces a experimentar sentirás más bienestar que malestar. Quizás hasta te sientas extrañ@ las primeras veces, pero es muy necesario para poder conectar con tu verdadero ser, con tu verdadera identidad que reprimas todos esos intentos de expresar lo que realmente sientes. Cada vez que reprimes, te dañas. Aunque tu actuación o tus palabras puedan hacer daño a otra persona. Piensa al final que las palabras no ofenden, somos nosotros mismos los que le damos ese valor de ofensa. Que esa es otra, que ganas de sufrir tenemos que buscamos cualquier situación o frase para sentirnos atacados o victimizados.

    Esta es otra espada de damocles muy instaurada en nuestra necesidad imperiosa de ser unos sufridores: sentirnos atacados por todo. Si alguien nos dice la verdad de lo que piensa y no nos gusta, en vez de agradecer su sinceridad, somos tan complicados que nos ofendemos y nos sentimos atacados y, casi siempre, respondemos con rabia y atacando. Sinceramente, a mi un insulto o una crítica, no te voy a decir lo que me importa, pero si te voy a decir que no me afecta para nada. Es más, como norma general, la agradezco. Sino lo hiciese, por ejemplo, no estaría haciendo estos videos y grabaciones con total tranquilidad y naturalidad, sabiendo que expreso lo que siento y pienso; aun a sabiendas de que habrá quien piense que esté chiflado, que se ría de mí o conmigo, o simplemente me ignore. Sinceramente no me afecta para nada porque en ningún caso me sentiría ofendido o atacado. Ya he repetido en diversas ocasiones que la voz que alzo aquí no tiene un fin de adoctrinar a nadie ni de convencer de nada, sino el que tú te cuestiones todas las cosas que aquí exponemos y que normalmente no lo harías. 

    A veces, en la vida es necesario hacer una pequeña parada y plantearse ¿qué estoy haciendo? ¿por qué soy así? Hay que observarse uno mismo para poder hacer grandes cambios. Hay quien ni siquiera llega a planteárselo en toda su vida y vive y actúa como un autómata y con una venda en sus ojos, normalmente por comodidad. Porque, como os dije en uno de los capítulos, salir de la zona de confort al principio puede ser incómodo. Preferimos mantenernos en una línea en la que crea que tengo todo controlado, aunque me esté fastidiando a vivir sin crearse expectativas que si luego no se cumplen, puedan producirme más frustración de la que ya puedo tener. Conectar con tu ser y liberarte de todas esas ataduras, puede tener el inconveniente de que cada día puede ser una aventura más y no una cotidianidad más. Ojo, que ello no implica que no tengas metas o expectativas, sino que no te sientas preocupado si llegan o no; lo que haces realmente es disfrutar de tu día a día venga lo que venga. Porque la felicidad o el bienestar por lo menos para mi, no es sólo que te puedan ocurrir cosas buenas; sino experimentar con todos tus sentidos todo aquello que la vida te ofrece. Esa es la verdadera felicidad del ser. Pero, sobre todo, siendo y actuando como tú sientes, sin estar domado por lo que socialmente pueda considerarse correcto. Ojo, sigo insistiendo en que esto no hay que llevarlo a un sentido literal ni a un extremo. Espero que trates de entender lo que realmente quiero transmitirte, porque somos seres muy racionales y al final, todo lo que aquí ves o escuchas no debe interpretarse en un sentido literal.


    Por eso, insistía mucho en la necesidad de desaprender para poder disfrutar de estos vuelos. Sino iniciamos ese proceso, jamás podremos llegar a ser nosotros porque la vida y la sociedad nos tiene entretenidos con multitud de frenos o piedras en el camino para que nunca podamos ser nosotros mismos. Hoy le ha tocado el turno a esa falsedad que nos acompaña toda nuestra vida. Porque realmente, por muy evolucionadas que puedan llegar a ser las mentes es difícil desprenderse de esta cualidad del ser. Pero, todo lo que no se intenta, te puedo asegurar que no se consigue. Lo que realmente quiero transmitirte y quiero hacerte pensar es en ese daño que me consta que realmente te produce, porque yo lo he vivido y lo he reconocido, aunque sea de forma inconsciente o involuntaria. Da igual, los mayores daños que nos provocamos suelen ser de forma involuntaria pero, fundamentalmente, vienen provocados por esa falta de atención de nuestro ser. Preferimos descuidarnos nosotros mismos con tal de agradar a los demás y eso realmente lo que produce es una destrucción de nuestro ser, o más bien, un ataque. Por ello, debes tomar consciencia y en otro vuelo lo desarrollaremos con más profundidad: el mayor enemigo que puedes tener eres tu mismo y nadie te va a provocar más daño y sufrimiento que tú. El día que seas capaz de entender esta cuestión y comiences a tomar consciencia de ello, de que tú decides que cantidad de sufrimiento quieres tomar; comienzan a cambiar muchas cosas de tu vida.

    Por eso, es necesaria esta parada de diez minutos semanal para tratar de dar un poco de oxígeno a tu ser. Tenemos que aprender a querernos un poco más, a cuidarnos y a valorarnos. La vida es efímera. Ten en cuenta que no sabemos, o más bien, no recordamos el día que nos toca marcharnos de aquí. Y que, en realidad, nada de lo que aquí vives o experimentas lo decides aquí; otra cuestión difícil de entender y aceptar; pero si consigues hacer estas paradas y tratar de conectar contigo mismo, podrás sentirte identificad@ con muchas de las cosas que aquí te cuento en voz alta. Como te he dicho, te las  cuento no para convencerte sino para hacerte recordar eso que tú ya conoces pero prefieres mantener fuera de tu mente porque así te es más fácil vivir esta experiencia. A mi que no me calienten la cabeza que bastante tengo yo con mi vida, como se suele decir.

    Buenos volador@, nuevamente llega la hora de bajar en altura y de acercarnos a nuestra realidad cotidiana que nuestra mente no puede estar mucho tiempo fuera de la rutina que nos mantiene entretenidos. Piensa en todo lo que hemos hablado hoy y trata de reconectar con lo que siente tu corazón. Esa es otra, y déjate llevar más por tu intuición y tu voz interna en las situaciones que más relajado te encuentres. Hagas lo que hagas. Y esto te lo cuento como curiosidad, yo cuando más me concentro y me relajo es conduciendo. Es cuando mejor conecto conmigo mismo. Hay quien lo puede hacer cocinando, o quien lo hace meditando. Tú te conoces mejor que nadie. Aprovecha para ver o escuchar estos capítulos en ese momento, porque sino esto sólo será como una música de fondo y de lo que se trata es de que te llegue realmente.

    En fin, no me enrollo más. Un día más te doy las gracias por estar ahí y que la próxima semana le volveremos a dar un empujoncito a este camino que juntos hemos iniciado. Un enorme abrazo y, sobre todo, disfruta de tu ahora, hagas lo que hagas.

    En Motril a 25 de Febrero de 2022

    Javier Mercado

Sino quieres leer, puedes escucharnos a través de nuestro podcast:

O bien a través de nuestro Canal de Youtube: 


domingo, 20 de febrero de 2022

Cap 12 La Muerte: La liberación real del ser.

 Muy buenas volador@. ¿Qué tal la semana? ¿Has podido pensar un poco en el Karma que te propuse la pasada semana? Seguro que aún estás dándole una vueltecita. ¿Estas tranqil@ y relajad@ para iniciar un nuevo vuelo? Te advierto que esta nueva aventura nos hará salir de nuestros hábitos más arraigados y, a veces, puede llegar a ser incómodo. Pero, es algo normal. Gracias, como siempre, por tus comentarios y sugerencias. Pasa y ponte cómodo porque comenzamos un nuevo Vuelo del ser.


Esta semana quiero tocar un tema que, para muchos de nosotros, es de las situaciones más incómodas y, a veces, desagradables que se pueden experimentar en nuestra vida. Me refiero a la muerte. Todos hemos vivido de cerca de una forma o de otra esta experiencia a través de un amigo, un familiar directo o un conocido. Pero hoy quiero que, tras el desarrollo del vuelo, comiences a verla con otros ojos. Y, sobre todo, a partir de ahora quizás empieces a entender muchas incógnitas. 

Imagino que a estas alturas de tu vida en algún  momento habrás pensado y ello. Y, por lo que veo en muchas ocasiones, la gente cada vez tiene más claro que todos tenemos una fecha de entrada, cuando nacemos y una fecha de salida, cuando llega el momento de nuestra muerte. Lo primero que debes de tener claro es que todos debemos pasar por dicho proceso para poder continuar nuestro viaje por los diferentes mundos que forman parte de nuestro Universo. A estas alturas de la vida, imagino que, también tendrás claro, que la Tierra no es el único lugar que existe en el Universo y que no estamos como en un circulo vicioso de nacemos, vivimos, morimos y volvemos a reencarnarnos una y otra vez en este mundo. La reencarnación trata de explicar o justificar al ser humano otra multitud de ideas que no son explicables de otra forma. Lo mismo que ocurría la pasada semana con el Karma. Si te das cuenta, el ser humano está continuamente tratando de buscar una causa o justificación a todo lo que le ocurre apoyándose en teorías que, hoy en día, deben de evolucionar.

Si te paras a pensar. El hombre no ha evolucionado mucho en todo este tiempo. Desde el los homínidos que le pedían a los dioses, egipcios, romanos, griegos, etc. El hombre siempre ha tratado de creer en un ser todopoderoso o múltiples a los que pedir para que les otorgue aquello que desean. Cuando se cumple se hace llamar milagro y sino se cumple se le llama providencia. En la actualidad, el hombre no ha cambiado mucho en su forma de pensar. Simplemente, se ha adaptado a los tiempos. Hoy en día, la gente acude a distintas terapias: constelaciones familiares, limpiezas energéticas, mediums, etc para tratar de dar una respuesta a aquello en lo que desean y no les llega. Yo he pasado por todas esas etapas para concluir que la vida es mucho más sencilla de lo que imaginamos y que finalmente aquí no creamos ni decidimos nada. ¿Por qué afirmo esto con tanta rotundidad?. Te invito a pensar un poco objetivamente y con una visión crítica. Cuántas personas conoces a tu alrededor que tienen éxito en la vida y todo lo que la sociedad denomina como estándares normales: estudios, trabajo, pareja, familia, etc. Y otras personas, sin embargo, pasan por esos estadios pero en muchas ocasiones, sufren momentos de paro, separaciones familiares, rupturas, etc. ¿A qué achacarías tú el que una persona pueda o no tener un trabajo o una familia por ejemplo? Podríamos decir que a la suerte, a que es muy buena persona y encuentra pareja, o simplemente porque es una experiencia que tiene que vivir.



Volvemos un poco a los temas centrales de nuestros vuelos y que hemos analizado anteriormente, pero es que todo está, en realidad entrelazado. Repasamos: aceptación, miedo, culpa, suerte, karma, confort. Fijaros que infinidad de argumentos y excusas se busca el ser humano para tratar de justificar o entender por qué y para qué esta aquí. Unas preguntas que cualquiera nos hemos planteado en algún momento. Y tratando de darle una justificación lógica, nos perdemos en ese maremagnun de teorías filosóficas y no tanto, en vez de concluir que simplemente estamos aquí para experimentar una aventura y unas vivencias o sensaciones. Porque una vez te marchas, todo termina aquí tal y como empezó. Con ello no quiero decir que como ser dejes de existir, ya que nuestro camino continúa en otro lugar. 

Lo que hoy quiero que tomes conciencia es que, a pesar de que ya he vuelto a mezclarlo todo una vez más, el momento de la muerte que era el tema principal de hoy; es un momento que pone fin a este viaje que experimentamos. Que la forma en la que cada uno nos marchamos es única y personal y no importa el hecho que la produzca, porque inevitablemente cuando llega tu momento pactado de tu marcha; ya sean a las horas de llegar, en unos pocos años o multitud de años después. Una vez llegado ese momento, no hay marcha atrás. Y no hay nada que pueda frenar esa marcha, ni por mucho que se nos ocurra pedir a Dios, si un familiar está enfermo y esa es la causa del fin de su vida, o bien, tienes un accidente o simplemente te han disparado. 

Lógicamente, hay circunstancias de la muerte que impactan mucho más que otras pero por la forma en que llegan. Cuando son inesperadas, violentas o prematuras. Pero ante ello, nada podemos hacer porque es inevitable. Además, es algo que desconocemos como norma general. Hay  personas que piensan que van a vivir toda la vida y se van en cuatro días y otras que piensan que se van a morir pronto y entierran a más de cuatro, como se suele decir en términos coloquiales. 

Lo que yo sí he reconocido y quiero tratar de transmitirte es que el momento de la muerte es un momento de felicidad para aquél que le llega. No pienses en los hechos que la rodean, sino en el fin que contiene la muerte en sí. Es el fin de tu experiencia terrenal y la continuidad de tu viaje, ya sin las ataduras y sufrimiento que aquí se experimentan. Es cuando el ser vuelve a ser libre mental y espiritualmente. Recopila toda su experiencia de vida y se la lleva consigo. Es el momento en el que comprendes todas aquéllas cosas que te han preocupado o amargado y dejan de ser un sufrimiento. Es la liberación y reencuentro con tu ser. Por eso te digo que, tarde o temprano, si realmente no consigues conectar con tu ser durante estas experiencias de vuelo que hacemos. Ten la absoluta certeza de que ese momento llegará irremediablemente con el momento de nuestra muerte. La conexión más profunda llegará ese día y esa hora. El deseado reencuentro.

Por eso, yo ahora la muerte la veo como un momento de felicidad y alegría para aquél que la vive en primera persona. No con dolor y pesadumbre o tristeza. Ojo, que eso no quiere decir que no eches de menos a los que ya se han ido. Pero he dejado de sufrir dolor por la pérdida de un ser querido. Y aunque pueda parecer una contrariedad, cada vez que fallece un ser querido, conocido o familiar: me alegro por él. Y esto que digo en voz alta puede sonar muy raro. De ahí, que te indicaba al principio de nuestros vuelos que para entender todo esto es necesario desaprender, porque sino desaprendes difícilmente podrás entender muchas de las cuestiones que aquí nos planteamos.

Tampoco te voy a decir que no sienta tristeza cuando se marcha un ser querido porque te engañaría. Pero si te puedo decir que me produce más alegría que tristeza. Porque sé que deja de sufrir, en muchas ocasiones, y porque sé que tras su marcha, le espera infinidad de experiencias que vivir por los diferentes mundos que componen este Universo. Por eso, te invito a que comiences a ver la muerte no como algo negativo y doloroso, sino como un momento de júbilo para el que le llega. Porque además, todos y cada uno de nosotros hemos de pasar por ese momento. Que esa es otra, hay quien piensa que no se va a morir nunca. Y eso es algo tan cierto como que nacemos, vivimos y morimos.    

Si piensas seriamente en ello y de una forma totalmente aséptica a los cánones preestablecidos te darás cuenta que es la realidad. Hoy en día, sino lloras ante la muerte de un ser querido se te puede tachar de mala persona, se te juzga si sales o entras, y no te digo hace unos años si no te ponías de luto. Eras un bicho raro. Bueno, tranquilos que para raro aquí tienes al que dice que la muerte es un momento de júbilo para el que la experimenta y para mi. Ojo, insisto, analizando la muerte en el sentido más estricto y literal de momento de tu marcha o abandono de esta experiencia y sin tener en cuentas las circunstancias sociales en las que ocurra. Como se suele decir una cosa es el fondo del asunto: la marcha y otra la forma o causa: enfermedad, violenta o de forma natural. Yo no entro a valorar la forma en la que ocurre. Es más, ya os dije, creo recordar que una idea a experimentar es ver la vida como un espectador y no como el protagonista. Cambia todo muchísimo y las sensaciones que vives son muy diferentes. Claro que ello hay que ponerlo en práctica y el hábito, como otro cualquiera, se va creando poco a poco.

Volador@, no sé cómo me las apaño que al final empiezo hablándote de una cosa y termino zigzageando de un sitio a otro. Pero, si te das cuenta todo está entrelazado. Termino este vuelo y antes de comenzar a bajar en altura y tomar tierra, quiero que comiences a ver la muerte como un proceso natural por el que todos hemos de pasar, con independencia de las circunstancias, y piensa que es el fin de las incomprensiones y sufrimientos terrenales para continuar nuestro viaje. Por tanto, es un momento de felicidad para el que le llega y vive, aunque pueda ser desconocida para los que nos quedamos aquí.

Y, por último, como antesala a otro próximo vuelo. Que te quede la tranquilidad de que nadie se queda aquí atrapado. que todos entramos y salimos de aquí cuando nos toca. Y que no retenemos a nadie por muchos cuentos chinos que nos hayan contado o películas que hayamos visto. Pero eso es harina de otro costal que ya iremos desgranando en otro vuelo. Hasta entonces disfruta de tu día a día hasta que nos llegue el momento de nuestra marcha. Un inmenso abrazo y gracias por acompañarme en este peculiar vuelo. 

En Motril a 19 de Febrero de 2022

Javier Mercado


Sino quieres leer, puedes escucharnos a través de nuestro podcast: O bien a través de nuestro Canal de Youtube:

sábado, 12 de febrero de 2022

Cap 11 Karma: Justificación de nuestros males.

     Muy buenas volador@. Una nueva semana dispuestos a darle un empujoncito más a nuestro vuelo semanal. ¿Te atreviste a salir de tu zona de confort? ¿Lo estás pensando aún? Todo actividad que indique hacer algo diferente es complicado, al principio. Como, por ejemplo, estar aquí cada semana viendo, escuchando o leyendo nuestros episodios. Muchos habréis desistido, simplemente, por lo complicado que puede ser resultar constante en algo para poder llevarlo a cabo. Tranquilo, que yo estaré aquí perenne cada semana, aunque tú te la saltes. No importa. Los capítulos quedan ahí para cuando tengas lugar, ganas o simplemente no sepas qué hacer. Como siempre, gracias infinitas por estar ahí un nuevo vuelo y si te parece vamos a tomar pista porque despegamos en El Vuelo del Ser.



Son muchos los temas que aún no hemos tocado y algunos de ellos, tendremos que retomarlos porque diez minutos no dan para mucho. Pero, como no tenemos prisa iremos poco a poco. Esta semana me gustaría hacerte pensar sobre otro enemigo que nos acecha a diario y que lo hacen llamar "Karma". Es curioso que el ser humano, en su ímpetu de buscar un por qué a su existencia se ha inventado multitud de teorías y tendencias que justificarían o, más bien, darían sentido a muchas de las cosas y experiencias que vivimos.


    Sin embargo, he decirte que la vida es mucho más sencilla de lo que parece. Pero, no podemos evitar buscarle un sentido a todo lo que nos ocurre. Por eso, tratamos de apoyar o justificar todo lo que nos ocurre en diferentes teorías. Hoy quiero hacerte pensar en una de las más extendida, como es el Karma. En otra ocasión, tocaremos otra muy interesante como es la Teoría espírita basado en la reencarnación del ser una y otra vez hasta que consigue domarse tras la vivencia de diferentes vidas. Pero, el Karma es algo más sencillo y básico. Viene a definirse como una energía que emana partir de los actos de las personas. Y viene a decirnos que si haces cosas buenas, el bien vendrá a tí y si haces cosas malas el mal vendrá a tí, aunque se tarde. Y añado esa coletilla de, aunque sea tarde, porque si de verdad existiese el Karma, aunque sea tarde nos debería llegar. Pero, a veces, no llega nunca por muchas cosas malas que puedas hacer.

    En realidad, el mismo, sin darnos cuenta nos condiciona o más bien, nos hacer sentir ciertos sentimientos o sensaciones cada vez que actúas. Porque tratas de querer relacionarlo todo con tus actos. Si soy una buena persona, recibiré cosas buenas. ¿Tú que piensas de ello? Yo sinceramente y tras mucho darle vuelta pienso que no es otra cosa más que la forma de negarnos lo que somos y cómo actuamos. Conozco, seguro que como tú, infinidad de personas que se pasan toda su vida haciendo el bien y, sin embargo, no llegan más que desgracias a sus vidas. Y, por el contrario, personas que son las más malas del mundo mundial y son de los más afortunados de este mundo. Por tanto, créeme que apoyar tus actos o actitudes en este tipo de teorías, no te trae más que dolores de cabeza. Es más, muchas veces, pensémoslo porque todos hemos cometido alguna pequeña maldad en nuestra vida, cuando haces algo que tu reconoces como una maldad hacia otro y luego te ocurre algo malo. Lo primero que piensas es en esa causa efecto de lo que hiciste como justificación del daño colateral.

             


Este tipo de pensamientos, yo lo veo así, nos hace esclavos de nuestros propios actos y no nos permite disfrutar de las vicisitudes que la vida nos ofrece porque siempre estamos pensando en ello. Y no te digo más si eres de los que todo el día estás martirizándote porque has hecho algo que no debías. Nuestra mente es tan sumamente poderosa que pretende, muchas veces, torturarnos con cosas insignificantes. Siempre lo he pensado y lo afirmo rotundamente: nuestro mayor enemigo somos nosotros mismos. No necesitamos buscar fuera lo que ya está dentro de nosotros. Y el abusar de de nuestro llamado cargo de conciencia ante cualquier actuación, nos impide disfrutar con total normalidad de todo cuanto acontece a nuestro alrededor.

    Por eso, yo te invitaría a que si forma parte de ti esa idea de que toda actuación tiene consecuencias y no te permite ser tú, que la quites de tu cabeza porque, créeme que lo único que te va a aportar son tremendos dolores de cabeza. El sentimiento de duda va muy unido a esa idea de Karma que nos atrapa ante cualquier hecho. ¿Causaré daño o no? ¿Seré bueno o no? ¿agradable o no?. Todo cuanto hacemos es preenjuiciado por nuestra mente hasta tal punto que finalmente exteriorizamos aquello que, ni siquiera, realmente sentíamos. Pero, no importa. Nada de lo que hagas o digas tendrá consecuencias o alterará todo lo que tengas que vivir mañana. Por mucho que te insistan. La vida es simplemente. Por favor, no te calientes la cabeza, ni pierdas tiempo en martirizarte antes de actuar. Guíate siempre por tu primera intuición o tu primer impulso, ese es realmente tu verdadero deseo. Si luego haces lo contrario, tampoco importa porque finalmente has experimentado lo que tu realmente querías. Así que no sirve de nada frenar tus impulso tratando de justificarte en que si haces algo que no está bien no haces lo correcto.

    Ojo, que con esto no quiero tratar de animarte a que seas mala persona si pasan cosas malas por tu cabeza. Simplemente te animo a que actúes y seas tal y como sientas sin importarte lo que pueda venir a consecuencia de tu actuación. Que nada ni nadie te frene. Por eso, es necesario poner en práctica todo lo que hemos venido hablando en episodios anteriores. Esto es como una cadena, eslabón a eslabón tienen que estar debidamente conectados para que puedas experimentar todas las sensaciones que te ofrece el Vuelo del Ser y el reencuentro con tu verdadera personalidad que es el objetivo final que nos hemos marcado en estos vuelos, Por eso, hemos de ir dando pequeños pasos que nos permitan ir uniendo esos eslabones para poder tenerlo todo muy bien asegurado y, una vez, que nos hayamos lanzado a vivir nuestra realidad no darnos de bruces contra el suelo. No pretendo hacerte volar sin medidas de seguridad, porque los altos vuelos ya te dije que provocaban mucho vértigo pero la sensación de libertad que produce merece mucho la pena.

Por tanto, ve pensando un poco en lo que hoy hemos puesto encima de la mesa. No pretendo que me creas a pies juntillas. Ya sabes que no vengo a convencerte de nada sino a animarte a que te lo cuestiones y que tu mismo saques tus propias conclusiones. Pero, piénsalo. Porque yo he sido el primero que siempre me he ido aplicando un freno ante mi forma de ser por miedo a no actuar correctamente y que me puedan traer consecuencias. O cuantas veces me he castigado yo mismo cuando he hecho algo que no consideraba correcto y luego me ha ocurrido algo malo y me he dicho, toma por tonto te ha pasado; ahora te aguantas. Y nunca he pensado que simplemente era lo que tenía que pasar y experimentar y a por otra cosa mariposa. Yo, te puedo asegurar que lo he apartado de mi vida y la tranquilidad que te produce desarrollar tu día a día sin dejar de prejuzgarlo por miedo a que pueda tener consecuencias es un bienestar indescriptible que te pido que lo experimentes. Aunque sólo lo hagas una vez. Yo lo practico ya a diario, por tanto, mi mente se ha liberado de una gran carga de pensamientos negativos que torturaban muchas de las actividades diarias que tengo que hacer al día.

    En fin, volador@ que no me puedo pasar en el tiempo prometido. Por ello, me despido de tí hasta la próxima semana en la que seguiremos abordando más cuestiones de este tipo. La mente es maravillosa, creativa, vital pero también puede ser aterradora y torturadora. No dejes que te haga daño. recordarte una vez más que agradezco tus comentarios y opiniones sobre el tema y nos vemos la próxima semana. Un inmenso abrazo.

En Motril a 12 de Febrero de 2022

Javier Mercado

          Sino quieres leer, puedes escucharnos a través de nuestro podcast:

          O bien a través de nuestro Canal de Youtube: 

sábado, 5 de febrero de 2022

Cap 10 Romper con la zona de confort: Comienzo del verdadero vuelo.

 Muy buenas volador@.  Una semana más dispuesto a iniciar un nuevo vuelo. ¿Qué tal la semana? Hoy cumplimos diez capítulos. Esto no acaba nada más que comenzar. ¿Sigues ahí al pie del cañón? Cuesta ¿verdad?. Romper con nuestra zona de confort es muy complicado porque eso nos hace no tener el control de la situación, lo que nos puede producir serios quebraderos de cabeza. Pero, te aseguro, que es mucho mejor que seguir un patrón ordenado y con todo previsto. Antes de arrancar nuestro décimo vuelo quiero agradecer los comentarios que me transmitís, muchos por privado, porque aún cuesta dar ese paso de expresar libremente lo que sientes pensando en las opiniones de los demás. Da igual, lo importante es dar ese paso de reconocimiento de nuestro ser. Si has llegado hasta aquí, te felicito por ello. Si llevas un poco de retraso, no desesperes, los grandes logros no se consiguen en dos días. Vamos a por nuestro nuevo encuentro de El Vuelo del Ser.

    Querido volador@, ha llegado el momento de comenzar una nueva etapa con respecto a nuestro ser. Sé que aún no has dejado tus miedos atrás, que el proceso de aceptación es lento y tedioso y que sigues pensando que la vida es cuestión de suerte. Te sigues agarrando a todo ello porque es tu zona de confort; la que te permite, dentro de tu caos diario, estar cómodo aunque sea rodeado de preocupaciones y problemas a los que la vida nos tiene acostumbrados. Qué ironías de la vida, llamamos zona de confort al caos y, sin embargo, a lo desconocido o que está por venir; por el mero hecho de no tenerlo controlado nos puede producir vértigo.

    Hoy quiero hacer hincapié en la necesidad de que dejes de tenerlo todo controlado y ordenado en tu vida. Con ello no quiero incitarte a que vivas de una manera desordenada. Lo que me quiero referir es a que comiences a experimentar el día a día tal y como venga, sin un previsión del mismo que luego te hace que sea un infierno cuando hay cualquier desajuste que no es lo que esperabas. Como norma general, llevamos una vida muy ordenada o prevista por nosotros mismos: quiero tener un trabajo, disfrutar del mismo, ganar dinero, tener una pareja o familia, un buen coche, etc. Esa digamos que sería nuestra zona de confort dentro de la sociedad, querer lo que todo el mundo quiere y dejarte la piel para conseguirlo. ¿Qué ocurre cuándo algo de lo previsto no llega o surgen dificultades?  Que nos acechan las preocupaciones, el malestar, la frustración por no llegar al objetivo marcado, etc.

    Hoy te voy a recomendar que cambies tu forma de enfrentarte a tu día a día. Ojo, que no va a cambiar nada de tu vida, en cuanto a lo que tengas que vivir. Pero, si te puedo asegurar que cambia mucho la percepción de todo cuando te enfrentas a algo sin prejuicios previos o expectativas. Tratemos de entender un poco mejor lo que quiero expresarte con un ejemplo o puesta en situación. Mi mayor deseo es encontrar un buen trabajo y me voy a enfrentar a una entrevista de trabajo. Voy con los nervios pensando que es lo que necesito, no puedo meter la pata, es lo que llevo deseando, he puesto toda mi ilusión en conseguirlo. Ahora bien, tienes otra forma de enfrentarte al mismo hecho: es una nueva oportunidad de encontrar un trabajo, voy a disfrutar la experiencia de conocer una nueva empresa, voy a mostrarme tal y como soy y no cómo quieran que sea, si realmente es mi lugar el trabajo será para mí, sino mi camino estará en otro lugar. Tras la entrevista, sólo pueden ocurrir dos cosas: que te escojan o que rechacen tu candidatura. Y eso no va a depender de uno mismo, ni mucho menos de la suerte te lo aseguro. Si has tenido a tu entender, una buena entrevista y no te han cogido, tenderás a consolarte diciéndote que no ha habido suerte o bien sintiéndote frustrado por no haber alcanzado dicho objetivo. Sin embargo, en ningún momento pasará por tu cabeza haber disfrutado de una nueva experiencia que es, en realidad, lo que has vivido.

    Salir de la zona de confort no es otra cosa que enfrentarte a tu día a día con la certeza de que vas a disfrutar de lo que vivas en cada momento, con independencia de los hechos a los que te enfrentes. En definitiva, dejar de clasificar todo aquello que experimentas con un calificativo: bueno o malo, feliz o triste, doloroso o placentero, sino simplemente con el propósito de nueva experiencia vivida. Por supuesto que lo que te planteo en este vuelo podemos denominarlo algo difícil, aunque para mí se definiría como algo incómodo. Porque el hecho de no tener la situación controlada nos hace mucho más vulnerables. Y preferimos tener siempre todo controlado o que vaya dentro de un orden social, aunque pueda ser no placentero o satisfactorio a no saber a qué te enfrentas.

    Veamos otra situación muy común que vivimos en nuestra época mas libre de nuestro ser la infancia. Cualquier niñ@ tiene una facilidad tremenda (salvo casos excepcionales) de relacionarse con cualquier otro niñ@. ¿Por qué? Simple y llanamente porque nuestra mente a esa temprana edad no ha tenido oportunidad de asimilar muchos de los prejuicios que nos graban a lo largo de nuestra mente las relaciones sociales. Cuando un niñ@ se acerca a otro para entablar una conversación o una amistad, no piensa previamente: será estúpido, será agresivo, me engañará, lo mismo me roba, etc. Sin embargo, cualquier adulto que se acerca a conocer a otro lo hace con una cautela que, a veces, es desmedida debido a la cantidad de prejuicios que pasan por nuestra cabeza antes de abrir la boca. Y no digamos si nuestro futuro amigo juzgamos que no está bien vestido, peinado o qué se yo. Nuestra zona de confort nos incita a evitar una situación por nuestros prejuicios propios. 


    
En nuestro vuelo de hoy no quiero hacer otra cosa que te detengas un momento y analices tu día a día. ¿Eres de los que prefieren la zona de confort? o bien, ¿estarías dispuest@ a vivir sin enjuiciar previamente?. En el momento que comiences a experimentar los efectos de la salida de la zona de confort, a priori, vas a sentir un poco de vértigo por no poder controlar tu día a día; o más bien prever. Ya que salir de la zona de confort no supone vivir en un caos. Es más yo lo llamo vivir al 100% tu experiencia de vida. Es muy apasionante levantarte cada mañana y no saber dónde vas a estar. Eso supone que cada paso que das es toda una aventura y tienes todos tus sentidos concentrados a vivir la experiencia que en cada momento te ofrece la vida. Ahora bien, si tratas de tenerlo todo organizado, programado y meticulosamente estructurado; en el momento en que algo de los marcado no ocurre como lo tenías previsto; aunque sea lo más insignificante te abruma una sensación de malestar.

    Por eso te invito a que te levantes cada mañana abierto a la experiencia que la vida te proponga: te quedas sin trabajo, cambias de ciudad, comienzas una nueva relación, pierdes un cliente, etc. Da igual lo que te ocurra. Cada aventura es una oportunidad más que te da la vida de experimentar sensaciones. recuerda que el día que todo termine, te irás te encuentres en el capítulo que te encuentres. Ya estés preparando unas oposiciones, pensando tener un hijo o creando una gran empresa. ¿A cuántas personas conoces que se han marchado en ese mismo proceso? ¿Qué ha ocurrido para que ya no estén? ¿No han sabido tener el control de su vida o más bien ese era su momento?. Sin embargo han desperdiciado gran parte de su vida intentando tenerlo todo controlado porque así se vive mejor.

    ¿Quién crees que vive mejor, en realidad? ¿El que tiene todo guionizado o el que prefiere vivir cada momento como una nueva aventura? Ojo, que con esto no quiero decir que si estás preparando unas oposiciones dejes de estudiar, o si tu empresa está creciendo dejes de trabajar en ello. Quiero que entiendas bien lo que trato de hacerte ver. Sólo has de cambiar o eliminar ese punto de presión que le pones a tu mente cuando te marcas unos objetivos. Se pueden tener sueños pero no hay que perder la vida en querer alcanzarlos. Porque, ¿sino llegan qué? Y si llegan genial. Lo importante es disfrutar ese camino, toque hoy pinchar en un bache o dar un acelerón.

    Trataremos de ahondar un poco más en esta cuestión que es una de las más difícil de adaptar en nuestra vida porque somos animales de costumbres y, como te he dicho, preferimos la comodidad de saber todo lo que vamos a hacer que la incertidumbre del mañana. Créeme, a veces esa pequeña dosis de incertidumbre te mucha más tranquilidad que el guión que tienes marcado en tu vida. Tan sólo, has de empezar a probar y seguro que cuando lo experimentes te atrapará y comenzarás a vivir con mucha más luz dentro de la oscuridad en la que nos encontramos muchos de nosotros.

     Cierro este nuevo episodio, no sin antes, desearte una buena semana y un buen inicio de tu aventura de vida fuera de los muros de tu cotidianidad de vida. Ábrete a la vida y a tus emociones. Siempre lo digo, será lo mejor que te llevarás de esta experiencia. Un enorme abrazo.

En Motril a 5 de Febrero de 2022.

Javier Mercado

Sino quieres leer, puedes escucharnos a través de nuestro podcast:


O bien a través de nuestro Canal de Youtube: 

SINCERIDAD: HACER LO CORRECTO DE FORMA TRANSPARENTE

 Buenos días: Hoy quiero compartir uno de los muchos conceptos o definiciones de SINCERIDAD. algo que cada día brilla por su ausencia en la ...